25 de octubre de 2013

MERCADO INMOBILIARIO - Un amor de verano

Los factores que debemos tener en cuenta cuando pensamos en una segunda vivienda destinada al descanso familiar.

Cuando una familia ya tiene su casa en la ciudad donde vive, a sus hijos en un colegio adecuado y una fuente de ingresos asegurada, es muchas veces el momento en que comienza a pensar en la posibilidad de comprar una segunda vivienda, destinada para el descanso.
Puede ser en la playa, la cordillera, en algún lago, en el campo o en algún otro lugar que le parezca conveniente.

Y si bien es importante cumplir este sueño, al mismo tiempo es importante ser capaces de armar un negocio fructífero a largo plazo. Sucede que muchas veces se cometen varios errores en la compra de una segunda vivienda, y es por eso que es importante identificarlos antes de que sea tarde
 
Comprar por impulso:
Encapricharse con una vivienda y comprarla sin valorar los pros y los contras y simplemente porque un día pasamos un buen fin de semana en la casa de unos amigos suele desembocar en una compra errónea.

Desconocer la zona:

Mcuhos compradores de segunda vivienda no conocen a nadie en la zona más que al vendedor de la casa o al corredor de propiedades. Es importante informarse bien y averiguar qué proyectos futuros vienen, como centros comerciales, escuelas, puentes y otras construcciones. También es importante averiguar si es que cerca existen lugares para abastecerse, y también clínicas o centros médicos, ya que todo esto puede hacer crecer los precios en el mediano y largo plazo. Olvidarse de los costos de mantención:

Una piscina es fantástica para el verano, lo mismo que un jardín, pero todo tiene costos de mantención, por más que no pasemos allí gran parte del año.

También es importante considerar gastos como el pago de contribuciones o los servicios.

Ignorar el clima:

Si uno comprar cerca del mar, o también en el campo, tiene que tener claro que en invierno es muy frío y que debe preocuparse de calefaccionarla. En cambio si compra en la cordilleratendrá que pensar que a lo mejor no le sirve para todo el año. 

Accesos a la segunda vivienda:

Es muy importante que uno antes de decidir la compra pueda ver las diferentes posibilidades de acceso que tiene, ya que un lugar demasiado lejano hará que no sea muy atractivo ir cualquier fin de semana. 

Espacios:

Hay personas que piensan sólo en el presente y no ven que el futuro está más cerca de lo que pueden pensar. Hay que considerar que los hijos normalmente traen amigos y que los mayores pueden traer una pareja. Este punto es muy importante, ya que si el espacio no es el suficiente será difícil su disfrute en familia.

Comparación con arrendar:

Si sólo vamos a utilizar la vivienda durante algunas semanas en verano, a la hora de comprar también
debemos pensar si no nos será más rentable arrendar la propiedad que comprarla. Hay que pensar, por ejemplo, que la segunda vivienda hay que habilitarla entera con muebles, electrodomésticos y otros.

Una vez que ya ha decidido que quiere comprar una casa o un departamento en la playa, cordillera o campo, debe decidir cómo va a financiar esa compra. En este sentido, puede pagar al contado o pedir un crédito hipotecario, normalmente un 80% del valor de tasación del activo. Si opta por esta segunda
opción, debe tener presente que toma una responsabilidad a largo plazo. Una idea de amortización es considerar la posibilidad de arrendar el inmueble algunas semanas en el año para poder ayudarse tanto en el pago del crédito como en los gastos de mantención del activo.

Finalmente, el objetivo es que una segunda casa no se convierta en un problema que lo tenga preocupado y, al contrario de ayudarlo a descansar, le quite el sueño


Fuente: Reivista Inversor Global - Chile - Octubre 2013

Autor:

Marcos Kaplún - Ingeniero Comercial - Director de Kayco International




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