30 de octubre de 2011

ARGENTINA: “Tips” para saber cómo va a funcionar la venta de dólares a ahorristas tras las nuevas medidas



Como un adelanto a lo que será un lunes agitado en la City porteña, el Banco Central (BCRA) ya dio a conocer la flamante comunicación que da el puntapie inicial para establecer mayores controles a la compraventa de dólares.

En efecto, el organismo a cargo de Mercedes Marcó del Pont emitió la comunicación A "5239" que constituye el puntapié inicial para la avanzada que será perfeccionada este lunes a través de la resolución general 3210 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

Para acceder al texto completo de la reglamentación emitida por el BCRA haga clic aquí.

En primer término, el futuro comprador de divisas deberá comunicarle al cajero del banco -o de la casa de cambio- el destino que le dará a los billetes verdes.

Luego, el empleado ingresará a un sistema online provisto por la AFIP que le avalará o denegará la operación.
Puntualmente, la nueva norma establece que "las entidades autorizadas a operar en el mercado de cambio deberán consultar y registrar todas las operaciones de venta de moneda extranjera a realizar con sus clientes".

Para ello, los empleados accederán al "Programa de Consulta de Operaciones Cambiarias" que será implementado por el fisco nacional a través de la resolución general 3210/2011, que se dará a conocer este lunes.
Como respuesta a la consulta, el sistema online informará si la operación resulta "validada" o "con inconsistencias".

"Hemos detectado más de un centenar de CUIT y CUIL cuyos ingresos no se condicen con los dólares que quieren comprar.

Por eso, desde el lunes, el que adquiera divisas extranjeras será automáticamente auditado por la AFIP, entidad que avalará la compra", había adelantado el ministro de Economía, Amado Boudou, el viernes por la noche.

El funcionario también había aclarado que "aquellos que quieran comprar dólares podrán seguir haciéndolo, con los mismos límites que rigen hasta ahora". Y añadió que la "única diferencia es que ahora en la pantalla de la casa de cambio o del banco habrá un aplicativo de AFIP, con el cual se validará la operación".

En otras palabras, la AFIP será quien convalide que las personas o empresas que adquieran divisas en el mercado cambiario cuenten los fondos correspondientes para hacerlo, y "así terminar con el mercado en negro", anunció Boudou.

En términos más técnicos, la nueva comunicación del BCRA lo detalla de la siguiente manera: "En los casos de ventas de moneda extranjera ya sean divisas o billetes, por conceptos de formación de activos externos de residentes sin la obligación de una aplicación posterior específica, las entidades autorizadas a operar en cambios sólo podrán dar acceso al mercado local de cambios a las operaciones con clientes que obtengan la validación en el sistema" online de la AFIP.

"El requisito de validación en el sistema de la AFIP no será de aplicación para las ventas de cambio que se realicen por otros conceptos que no correspondan a la formación de activos externos de residentes sin aplicación a un destino específico", advierte la nueva comunicación A "5239".

Por otra parte, la nueva reglamentación del Central deja afuera de los controles a determinados sujetos.

Puntualmente, se excluye del nuevo trámite a "las representaciones diplomáticas, organismos multilaterales y gobiernos provinciales".

De obtener la validación del fisco nacional, el comprador recibirá de inmediato los dólares. Por el contrario, ante la denegatoria, el interesado deberá concurrir a una agencia de la AFIP para conocer los motivos del rechazo.




Mesa de ayudaAl respecto, desde la AFIP confirmaron que un equipo de técnicos del organismo pondrán en funcionamiento el lunes una especie de "call center" para evacuar las dudas de los empleados de los bancos que tienen a su cargo las operaciones de moneda extranjera.

En igual sentido, el organismo que responde a Ricardo Echegaray destinará un empleado de esa dependencia en cada sucursal bancaria de todo el país, para que trabaje como asistente de las entidades si encuentran problemas a la hora de validar las operaciones.

En tanto desde la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), informaron que las entidades financieras "no podrán canalizar operaciones de moneda extranjera por cajeros automáticos, banca por Internet y banca telefónica, hasta tanto se haga la adecuación técnica necesaria de los sistemas".

A este respecto, aún resta que se pronuncie la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA).
Ante la imposibilidad, ABA recomendó a los futuros compradores de dólares que, "para facilitar el trámite, consulten previamente en la página web de la AFIP si se encuentran habilitados para realizar la operación".

28 de octubre de 2011

URUGUAY: Acuerdo con Argentina daría a la AFIP datos de US$ 2.200: en ahorros

Críticas de OCDE. De firmar acuerdos por intercambio de datos con la región afirman que se afectará mercado inmobiliario Expertos tributaristas plantean varias "alternativas" al gobierno

La AFIP se llamó a silencio ayer luego que el gobierno uruguayo anunció que negociará un acuerdo de intercambio de datos fiscales, con el que el organismo recaudador argentino podría alcanzar a depósitos locales por US$ 2.224 millones.

En la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) se negaron ayer a hacer declaraciones tras los anuncios del vicepresidente Danilo Astori. Fuentes del organismo señalaron que el silencio procura no introducir ruidos políticos en momentos en que el gobierno uruguayo empieza a entregar señales de mayor flexibilidad.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) informó el martes que Uruguay no pasó la primera fase de su revisión de pares por no cumplir con algunos estándares de transparencia global, entre los que figuraba no tener acuerdos con "socios relevantes", como Argentina y Brasil. Tras ese anuncio, Astori dijo que "Uruguay está decidido" a hacer un planteo a nivel de los países del Mercosur para avanzar en acuerdos de intercambio de datos fiscales.

La AFIP, dirigida por Ricardo Etchegaray, viene solicitando desde fines de 2008 concretar un convenio bilateral con la Dirección General Impositiva (DGI) para intercambiar información tributaria. Pero el trabajoso reestablecimiento de las relaciones entre los dos países tras el conflicto por la planta de celulosa UPM (ex Botnia) y la necesidad de no agregar nuevos elementos de rispidez hizo que la presión argentina disminuyera en los últimos meses.

Lo cierto es que las modificaciones tanto en la posibilidad de dar datos a Argentina como en la estructura de las sociedades anónimas abriría una fuente incalculable de datos para el organismo recaudador de ese país, ya sea tomando en cuenta el volumen de depósitos que hay en el sistema uruguayo como el hecho de que al menos el 50% de las operaciones que se realizan con inmuebles en Punta del Este involucran a argentinos. El gobierno de Cristina Fernández necesita recursos ante el debilitamiento de su situación fiscal y estos datos podrían ser útiles.

Para el tributarista Jorge Gaggero, del Centro de Economía y Finanzas para el Desarrollo de la Argentina, contar con información desde Uruguay mejoraría la recaudación tributaria "solo en el margen". "Pero hay cosas que meten mucho ruido, como las cerealeras que exportan soja a Uruguay mediante un mecanismo de triangulación para pagar menos impuestos en la Argentina y para terminar exportando a otro destino real", señaló.

Además de los propietarios de inmuebles en Maldonado, en la AFIP tienen sospechas de empresarios argentinos que cuentan con acciones de compañías radicadas en Uruguay no declaradas. De hecho, la OCDE recomendó que se realicen cambios en el régimen de acciones al portador para que se pueda conocer con precisión quiénes son sus dueños.

En este tema ya se han hecho avances a nivel de sociedades anónimas con acciones al portador que son propietarias de tierras o titulares de explotaciones agropecuarias, que desde el 1° de julio debieron pasar a ser nominativas para poder comprar campos, lo que permite identificar a sus propietarios.

El otro segmento al que apuntan las autoridades argentinas está conformado por titulares de cuentas bancarias en el sistema local, sobre todo si se tiene en cuenta que la fuga de capitales alcanzará este año en Argentina a US$ 22.000 millones, según la consultora Ecolatina. En Uruguay, los depósitos de no residentes en el sistema financiero local representaban a fin de 2010 la cuarta parte del total. De cada US$ 10 que había depositados de un no residente, US$ 7 eran de argentinos.

En total unos US$ 2.224 millones de clientes de esa nacionalidad estaban depositados, sobre todo en bancos privados, según datos procesados en base a datos del Banco Central. En tanto, los depósitos de brasileños eran por solo unos US$ 200 millones a diciembre. Pero a esos montos que se encuentran a nivel bancario se suman otros del sistema financiero no contabilizados por el Banco, como los que se encuentran en otras instituciones. En esos casos, de todas formas, puede que incluso levantando el secreto bancario no se las alcance ya que se trata de cuentas manejadas desde Uruguay pero abiertas en las casas matrices instaladas en EE.UU. o europa.

A nivel de inmuebles el impacto sería elevado también. "La mayoría de las transacciones en Punta del Este son de argentinos", dijo a El País el analista inmobiliario Julio Villamide. Indicó que esa ha sido la tradición en las últimas décadas y agregó que en el último año y medio también aumentó su participación en Montevideo y en el mercado rural en los últimos "cinco o seis años". A eso se suma el interés de los argentinos por adquirir propiedades en Colonia. "La presencia de propietarios argentinos es casi masiva sobre la costa y es muy importante dentro de la ciudad también".

El analista dijo que si se acordara intercambiar datos con Argentina el impacto sobre el mercado sería negativo, aunque "es difícil medir su intensidad". De todos modos, dijo que cuatro años atrás el impacto sería mucho más negativo, ya que en la actualidad existe un retorno de capitales a la región debido a la incertidumbre que genera tener colocaciones en bancos o títulos de Europa o Estados Unidos.

Si bien con el intercambio de datos Argentina podría conocer qué ciudadanos evaden impuestos, lo correcto sería previamente firmar un acuerdo para evitar la doble imposición. De esa manera, se evitaría que los argentinos paguen impuestos en los dos países.

Las cifras
200 Millones de dólares son los que tenían brasileños al cierre del año pasado en el sistema bancario local, según datos del BCU.

50% De las operaciones de compraventa de inmuebles en Maldonado se sostiene que se realizan con argentinos.

LAS ALTERNATIVAS QUE PROPONEN LOS EXPERTOS
David Eibe
Exdirector de asesoría tributaria del MEF.

"Apoyo de países pesados"

Quien era asesor en el Ministerio de Economía cuando Uruguay fue incluido en la "lista gris" de OCDE estimó que el gobierno debería usar su buena imagen internacional para capitalizar la opinión favorable de "países pesados" como Francia, Alemania, España y México, con los que ya tiene convenios de intercambio de datos vigentes.

Gianni Gutiérrez

Carlos Loaiza
Máster en tributación

"La solución es regional"

El socio del estudio Olivera Abogados sostiene que Uruguay debe caer en cuenta que las presiones no son internacionales sino regionales, por lo que el gobierno debe encarar su estrategia de salida con "realismo", sabiendo que la solución pasa por negociar con Argentina y Brasil. "La solución es sentarnos a hablar con los vecinos a ver qué logramos", djio.

Leonardo Costa
Profesor de fiscalidad internacional

"La salida que tomó Suiza"

El abogado sostiene que el informe de la OCDE sobre Uruguay contiene "imprecisiones" y "errores interpretativos" sobre la normativa uruguaya. En cuanto al requisito de firmar un convenio con Argentina cree que una alternativa puede ser la que adoptó Suiza con Alemania: le cobra impuestos a los alemanes que tengan dinero en sus bancos y luego vuelca esa recaudación sin identificarlos.

LAS CLAVES TRAS EL INFORME
EXIGENCIA DE CAMBIOS
Al igual que otros 59 países que pasaron por este proceso de "revisión de pares", Uruguay fue examinado por OCDE para ver si cumplía con los estándares de transparencia global y no aprobó la primera fase a pesar de sus avances. Los motivos principales fueron el actual régimen de acciones al portador, la falta de intercambio con "socios relevantes"(Argentina y Brasil) y algunas objeciones a la flexibilización del secreto bancario, como su no retroactividad y el aviso previo al contribuyente.

REFLEJO OFICIAL de cambiar
Conocido el informe el vicepresidente de la República, Danilo Astori, informó que el gobierno estudiará las propuestas para conocer la identidad de los propietarios de sociedades con acciones al portador. Además "planteará a los países del Mercosur avanzar en acuerdos de intercambio de datos". Tras esto, el propio Presidente, José Mujica, dijo a El País que "no conviene quedar en la ilegalidad internacional" reafirmando el interés de cambiar las reglas actuales.

Magnitud de las modificaciones
Pese al anuncio, el vicepresidente dejó en claro que el acuerdo de intercambio de información sería a nivel Mercosur, esto es, evitaría la negociación bilateral. Asimismo, en el caso de las sociedades anónimas con acciones al portador dejó planteado que se podría ir desde la eliminación de las mismas hasta mantenerlas pero asegurando que el Estado tiene a disposición la identidad de los propietarios.

Plazo de los CAMBIOS
Si bien la OCDE estableció un plazo de 12 meses para hacer una revisión del informe, la fase dos de la revisión de pares comenzará recién en 2014, por lo que Astori dijo que el lapso es "suficientemente extenso" para considerar los instrumentos y satisfacer los planteos.

21 de octubre de 2011

URUGUAY: propiedades en algunos barrios duplicaron su valor en 6 años

Los apartamentos del Parque Rodó y las casas de Pocitos fueron los inmuebles que más se valorizaron en los últimos cinco años. Hoy, un inmueble en esas zonas se paga a más del doble de su precio en 2005.

Medido en dólares, el valor de los apartamentos en Montevideo aumentó 79,8% en los cinco años finalizados en 2010. Las casas, en tanto, se encarecieron 62,6%. Sin embargo, ese incremento no se dio de forma homogénea entre los distintos barrios.

Según las cifras relevadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y procesadas por El Observador, en Parque Rodó el aumento fue de 135,9% durante el período. El metro cuadrado en compraventa alcanzó un valor de US$ 1.302 en 2010, con lo cual superó en los últimos tres años a barrios como Malvín, Buceo y Parque Batlle.
En el último año los apartamentos vendidos en  Parque Rodó registraron un aumento de precios de 28,9%, muy por encima de la media de Montevideo, de 21,9%.

Otros barrios también duplicaron los precios de compraventa para inmuebles de propiedad horizontal en el último lustro. Entre ellos se encuentran Centro, Unión y
Tres Cruces, con subas de 111,8%, 109,7% y 100,4%, respectivamente.

Los tres barrios de valores medios –los precios de venta van desde US$ 822 el metro cuadrado en la Unión a US$ 1.066 en Tres Cruces– registraron un importante crecimiento en los últimos años.

De hecho, durante 2010, Tres Cruces fue la zona de la ciudad que más se encareció en las operaciones de venta de apartamentos, con una suba de 30,7%.
Para el caso del Centro, en cambio, el incremento de precios fue de 20,4% en el último año, y  se ubicó por debajo del promedio de la capital.

Los valores de inmuebles más estables en los últimos cinco años correspondieron a Punta Carretas, que es también la zona de la capital más cara para la compraventa de inmuebles en propiedad horizontal. El metro cuadrado en el barrio costero se ubicó en US$ 1.418 en el último año, con un incremento de 66% respecto a 2005, menos de la mitad de lo que se encareció el Parque Rodó en términos relativos.

Las casas, en tanto, registraron una suba más moderada que los apartamentos. Solo en Pocitos se duplicaron los precios durante el último quinquenio, con un incremento de los valores de 108,9%. Las compraventas alcanzaron una media de US$ 942 el metro cuadrado durante 2010.

Hace cinco años, las propiedades en Pocitos tenían un valor más bajo que las de Malvín. La diferente evolución del precio en los dos barrios llevó a que Pocitos superara, en la media, el valor de las viviendas de Malvín a partir del último año relevado por el INE.

Si se considera únicamente el último año, Punta Carretas toma la vanguardia en la apreciación de sus inmuebles. Las casas  en esa zona se encarecieron 33,3% respecto a 2009.  En la última medición los inmuebles registraron un repunte luego de mostrar una evolución moderada durante los cuatro años anteriores.

20 de octubre de 2011

URUGUAY: fuerte mejora en clima de negocios

Pasó del puesto 107 al 90 en un año; la ventana única ayudó. Uruguay escaló 17 posiciones en el clima de negocios y ahora se ubica de mitad de tabla hacia arriba (en el puesto 90 entre 183 países) según el informe Doing Business (Haciendo Negocios) 2012 elaborado por el Banco Mundial.

En el reporte se destacaron dos reformas que implementó Uruguay y que contribuyeron a mejorar su posición en el ranking. Una es haber facilitado la apertura de empresas, al establecer una ventanilla única para realizar los trámites denominada "Empresa en el día". La otra es que "mejoró su sistema de información crediticia" al dar la posibilidad de acceder a la Central de Riesgos del Banco Central a empresas y personas -antes solo los bancos lo podían hacer- lo que permite chequear el historial de préstamos de empresas y particulares.

Los cinco mejores países para hacer negocios siguen siendo los mismos (y en las mismas posiciones) que en el informe 2011: Singapur, Hong Kong, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Dinamarca. Completan los 10 primeros: Noruega (que pasó del 7° al 6°), Reino Unido (pasó del 6° al 7°), Corea (subió del 15° al 8°), Islandia (pasó del 13° al 9°) e Irlanda (que bajó del 8° al 10°).

El Banco Mundial ubica a Uruguay en el lugar 57 entre los países que más avanzaron en reducir la brecha con los líderes en clima de negocios entre 2005 y 2011.

En el reporte 2012 hay cinco países de América Latina que se ubican por encima de Uruguay: Chile (39°), Perú (41°), Colombia (42°), México (53°) y Panamá (61°).

Cabe destacar que con la mejora que tuvo Uruguay (90° en 2012 cuando era 107° en 2011), pasó a varios países que en el informe 2011 estaban por delante. Eso se dio en el caso de China (91° en 2012 y 87° en 2011), Serbia (92° y 88°), Guatemala (97° y 93°), Vietnam (98° y 90°), Grecia (100° y 101°) y Paraguay (102° y 100°).

Además, el país se posicionó por encima de Argentina (113° en 2012), Brasil (126°), Ecuador (130°), Bolivia (153°) y Venezuela (177°).

ÍNDICES. En los diez rubros que considera el Doing Business, Uruguay rankea muy bien en la de facilidad para la "obtención de electricidad", donde se ubica en el puesto 7 a nivel mundial, con cuatro procedimientos, 48 días y un costo de 15,9% del ingreso per cápita para tenerla.

En la facilidad para "comenzar un negocio", el país se ubica en el lugar 32 a nivel mundial, con cinco procedimientos que llevan siete días y cuestan 24,9% del ingreso per cápita.

En "resolución de insolvencia" Uruguay se posiciona 50 a nivel mundial con un tiempo de 2,1 años. Otro de los rubros donde el país se ubica por encima de la media es en "obtener un crédito", donde rankea 67 a nivel mundial. Allí obtiene 6 puntos sobre 6 en "profundidad de la información crediticia" y 4 puntos en 10 en "fortaleza de derechos legales".

En otros dos rubros Uruguay no está ni bien ni mal, ellos son: "protección al inversor" (lugar 97 entre 183) y "cumplimiento de los contratos" (puesto 103).

Sin embargo, en cuatro rubros Uruguay está mal posicionado para hacer negocios.

En "comercio transfronterizo" se ubica 125, con nueve documentos necesarios para importar o exportar bienes, 17 días para exportar y 22 para importar y un costo de US$ 1.100 y US$ 1.330 por contenedor respectivamente.

En "manejo de permisos de construcción" el país ocupa el puesto 153 a nivel mundial, al ser necesarios 27 trámites, 234 días y un costo de 74,4% del ingreso per cápita para salvar la instancia, según el reporte.

Peor aún está en "pago de impuestos" (160° a nivel global), ya que las empresas deben hacer 53 pagos por año, lo que les insume 336 horas y además el porcentaje de tributos pagados es el 42% de las ganancias.

Finalmente, en "registro de la propiedad" Uruguay ocupó el lugar 165. Este rubro lleva ocho trámites, 66 días y tiene un costo de 7,1% del valor de la propiedad.

18 de octubre de 2011

URUGUAY: entrevista a Pablo Sitjar sobre bancarización en el país

Como tenemos una población envejecida, el público es conservador y naturalmente reticente a usar equipos electrónicos

En los países donde se ha promovido la bancarización, los niveles han aumentado a través de incentivos fiscales, que generalmente no son simpáticos porque hay que forzar al público para que se "bancarice", afirmó el contador Pablo Sitjar, director de Renmax Sociedad de Bolsa y vicepresidente de la Bolsa de Valores de Montevideo. El entrevistado también analizó la situación y perspectivas del mercado de capitales en Uruguay. A continuación un resumen de la entrevista.

-¿Cómo evalúa la situación del sistema bancario uruguayo?

-Tiene la mayor solidez que se haya visto en muchas décadas. El sistema es líquido, tiene bajos niveles de riesgo de crédito en una economía que crece y la exposición es pequeña. La debilidad de la banca uruguaya consiste en que carece de rentabilidad. Si bien esto puede atribuirse a un excesivo número de instituciones bancarias en la plaza, también obedecería a otros factores, tales como el proceso de ajuste resultante de la experiencia bancaria traumática de 2002.

-¿De qué modo podría recuperar rentabilidad el negocio bancario en Uruguay?

-Aunque hoy todavía prima el conservadurismo en el negocio bancario local, tarde o temprano las instituciones van a tomar mayores riesgos dado que la baja de las tasas de interés en el mundo ha afectado sensiblemente su rentabilidad. La tasa Libor al 5% en 2003 generaba una rentabilidad muy buena con escasísimo riesgo para la banca local. Pero hoy, con una tasa de prácticamente cero en dólares, no es negocio para los bancos captar depósitos, salvo que tengan la certeza de que los van a prestar de inmediato.

El desafío está en que la banca local salga a conceder créditos. Sin embargo, habrá que evitar lo que ocurrió en la segunda mitad de la década del noventa cuando los bancos empezaron a tener problemas de rentabilidad, y se apresuraron a prestar a los sectores inmobiliario y automotor, que luego fueron los que crearon mayores problemas. Actualmente, la normativa se ha ajustado mucho y no es predecible que eso ocurra. El reto, entonces, es aumentar la rentabilidad sin incurrir en riesgos con la capitalización.

-Últimamente se ha hablado mucho de aumentar la bancarización de la población. ¿Cuál es la tendencia para el corto y mediano plazo?

-El incremento de las operaciones a través de equipos electrónicos, sobre todo en el sistema de pagos, es inexorable en todo el mundo por una cuestión de costos de las instituciones bancarias. Quizás este fenómeno se dé más lentamente en Uruguay.

-¿A qué obedece la lentitud con que avanza ese proceso?

-Se debe tener en cuenta que Uruguay tiene una población envejecida. Ese público es naturalmente conservador y, por lo tanto, reticente a utilizar la banca electrónica. En los países donde se ha promovido la bancarización, los niveles han aumentado a través de incentivos fiscales, que generalmente no son simpáticos porque hay que forzar a la gente para que se "bancarice". Me refiero a que cualquier incentivo fiscal implica que se va a cobrar un impuesto si los usuarios persisten en seguir operando como lo hacían anteriormente, es decir que hay un componente forzoso considerado invasivo.

-¿No habría más gente bancarizada si los servicios bancarios no fueran tan onerosos?

-Por cierto que sí, pero hay que pensar por qué esos servicios son caros. Si fuera porque la banca está generando grandes ganancias, evidenciaría falta de competencia en la plaza, lo que se resolvería habilitando más licencias bancarias. Como ese no es el caso, los costos de operar con los bancos reflejan los costos de las propias instituciones financieras. Entonces, para reducirlos se puede recurrir a reformas microeconómicas que son complicadas de implementar en una actividad donde más de dos tercios de los costos están directa o indirectamente relacionados a los salarios.

Mercado de capitales

-¿Por qué son pocos los inversores uruguayos que recurren al mercado local de capitales y también son escasas las empresas que emiten títulos bursátiles?

-Luego de finalizada la Segunda Guerra Mundial, más de cuarenta empresas uruguayas cotizaban acciones en la Bolsa de Valores. Sin embargo, una baja regulación, poca protección a los accionistas minoritarios y escasas limitantes para operar con información privilegiada contribuyeron paulatinamente a que el mercado de capitales se fuera reduciendo. A ese proceso se le agregó la crisis de deuda de la década del ochenta, que afectó particularmente a las empresas que cotizaban en bolsa.

-¿Es muy difícil reactivar a un mercado accionario que ha tocado fondo?

-Sí. En primer lugar, las grandes empresas que operan localmente han pasado a manos de compañías extranjeras. Por una cuestión de economía de escala, ahora les resulta más conveniente hacer una emisión de acciones en la Bolsa de San Pablo o de Nueva York que en la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM). En segundo término, las empresas medianas, que aún son propiedad de capitales uruguayos y están en condiciones de emitir acciones, tendrían que abrir su información al público para transmitirle al inversor los datos relevantes; pero eso también va en detrimento de ellas mismas ya que están en crecimiento y compiten con compañías multinacionales. Estas no presentan su información en Uruguay y, además, los datos de la subsidiaria local quedan encapsulados en los balances de la casa matriz, que es la que emite acciones.

Todos esos factores apuntan a que sea difícil recurrir al mercado de capitales en una plaza pequeña. No obstante, esa situación se ha superado en otros mercados y, quizás, se dé en Uruguay cuando las necesidades de inversión de las empresas públicas, compañías multinacionales y Pymes uruguayas no puedan crecer más con fondos propios y tengan que recurrir a la apertura de su capital a terceros.

-Según un diagnóstico del Banco Mundial realizado el año pasado, el mercado de valores privados en Uruguay es "pequeño" y, por tanto, ha tenido "un rol mínimo como fuente de financiamiento para el sector privado". ¿Qué hace falta para superar ese hándicap del mercado de valores?

-Habría que pensar el mercado de valores del mismo modo como está pensada toda la industria uruguaya que apunta a la región. Por ejemplo, el desarrollo de la industria bancaria no está dado en función del mercado local, sino de los mercados vecinos. Por lo tanto, la BVM va a recuperar importancia en la medida que esté integrada a una estrategia regional. En ese caso, Uruguay podría convertirse en la puerta de entrada o el lugar más eficiente donde las empresas de la región coticen sus títulos por la seguridad jurídica, la transparencia, el régimen fiscal, la facilidad del movimiento de capitales, etc., es decir sería más eficiente emitir aquí. En resumen, la BVM tiene un futuro muy interesante como prestador de servicios al mercado de capitales de la región y no necesariamente a las empresas uruguayas.

-Entre otras acciones, el informe del Banco Mundial recomendaba la creación de una "bolsa especializada para pequeñas empresas de rápido y alto crecimiento". ¿Se ha hecho algo al respecto en la Bolsa de Valores de Montevideo?

-Esa recomendación es válida con la idea de atraer capitales a Uruguay. En la BVM se está trabajando para dinamizar a la institución. Un aspecto a considerar es que las bolsas son prestadoras de servicios y para que cumplan esa función debe haber un oferente y un demandante. Pero eso trasciende a lo que puede hacer la Bolsa. Se requieren incentivos para la creación de pymes y debe haber un número suficiente de este tipo de empresas para que el inversor pueda diversificar su portafolio ya que sus títulos tienen altísimo riesgo. Estados Unidos lo puede hacer porque allí operan millones de pymes. Indudablemente, la escala es muy importante para darle continuidad a este negocio.

Títulos

-¿Cómo está operando el mercado de obligaciones?

-Fundamentalmente, las empresas públicas y las empresas privadas nacionales recurren al mercado de obligaciones porque las compañías internacionales tienen acceso a un financiamiento más favorable afuera de Uruguay. Esta modalidad les ofrece a las empresas uruguayas un financiamiento a mediano plazo en condiciones favorables que no obtendrían de otra manera.

-¿Qué trabas existen para que ese tipo de títulos no se desarrolle más?

-Hay pocas empresas nacionales que recurren al mercado de obligaciones porque en su mayoría son productoras de commodities y al ser generadoras de divisas extranjeras, su riesgo es muy interesante para organismos multilaterales de créditos y agencias de desarrollo. Como el fomento de las exportaciones de países de las características de Uruguay está dentro de los mandatos de dichas entidades, les otorgan préstamos a tasas muy convenientes.

-¿Cómo evoluciona la creación de fideicomisos?

-El mecanismo del fideicomiso es muy atractivo para los inversores, pero está limitado a las empresas que pueden generar flujos de caja independientes. De todos modos, existen otras limitaciones porque, a pesar de ser un patrimonio independiente, el balance de la empresa es una limitante. Por ejemplo, si las empresas estatales que no están en una buena situación de capitalización pudieran emitir fideicomisos, les resultaría un mecanismo válido.

Hay que fijar límites absolutos al apalancamiento de los bancos
-Según Santiago Carbó, profesor de Teoría e Historia Económica de la Universidad de Granada, "el negocio financiero está cambiando de forma drástica. La banca postcrisis será un negocio de escasos márgenes, con estricto control regulatorio, una actividad algo más aburrida incluso". ¿Cuál es su opinión al respecto?

-Desde la crisis de 2008 se viene dando una discusión acerca de qué hacer con el negocio bancario futuro y disminuir el riesgo moral. La banca tiene la particularidad de que es una empresa privada, pero al mismo tiempo es una empresa de interés público. Como opera con un nivel de apalancamiento muy alto, por lo general los bancos tienen un nivel de capital sobre activos, dependiendo del tipo de activos, de entre el 5% y el 10%. Por tanto, cualquier variación macroeconómica o cualquier efecto de una mala gestión pueden erosionar esa base de capital. Además, la banca trabaja con los medios de pago del público y, por ende, es una actividad fiduciaria. El banquero maneja fondos de terceros, quienes delegan en él la función de recircular ese dinero en la economía para otorgar préstamos a los agentes demandantes. Ese principio básico se dejó parcialmente de lado con la desregulación de la década del noventa, con lo cual se perdió relativamente el control de lo que hacían los bancos. Como estos manejan los ahorros públicos ameritan un grado de supervisión mayor.

-¿Por qué algunos académicos estiman que la actividad bancaria se convertirá en un negocio aburrido?

-Se debe a que, con la baja de las tasas de interés registrada en las últimas dos décadas, la rentabilidad de la banca ha ido disminuyendo. Por esa razón, el sector bancario fue buscando otro tipo de negocios vinculados, aunque no son esenciales a la actividad de la banca tradicional que básicamente captaba depósitos y los prestaba. Así fue como los bancos comerciales norteamericanos de primer nivel se involucraron en los negocios de banca de inversión, con lo cual quedaron más expuestos al riesgo. Esa actividad se desarrollaba bajo el mismo paraguas que protegía a los ahorros de los depositantes. Por eso, la tendencia actual se guía por la Regla Volcker que propone limitar la especulación, es decir que no se permita especular a los bancos con capital propio porque esos fondos están para proteger al depositante. Si quieren especular, pueden hacerlo aparte del balance del banco.

-¿Qué cambios tendrán que darse para hacer al sistema financiero más fuerte y fiable?

-En todo el mundo, los gobiernos están procurando capitalizar los bancos, pero resulta difícil hacerlo en medio de una crisis. La capitalización les baja la rentabilidad, con lo cual el mercado accionario los penaliza y les resulta más costoso aumentar el capital. En definitiva, una supervisión más orientada al sentido común y menos a la creencia absoluta en modelos cuantitativos que en períodos críticos no funcionan tan adecuadamente. Se podría recurrir a aspectos específicos en la normativa bancaria como, por ejemplo, ver si está bien medir los riesgos de los activos en función de lo que se coloca, o de su volatilidad, o de su correlación estadística. Pero, definitivamente, tienen que fijarse límites absolutos al apalancamiento y reconocer filosóficamente, desde el punto de vista de los Estados, que un banco no es una empresa privada cualquiera.

No existe un verdadero mercado de futuros cambiarios
-A pesar de una cierta mejora, Uruguay sigue siendo un país con alta dolarización, donde las empresas tienen mucha exposición cambiaria en sus balances financieros y flujos netos de ingresos. ¿Se recurre al mercado de futuros cambiarios para cubrir los ingresos operativos en moneda extranjera ante una eventual devaluación del peso?

-Si bien hay agentes que cotizan transacciones de futuros cambiarios en la plaza uruguaya, no existe realmente un mercado de ese tipo donde se pueda comprar y vender con fluidez, ni donde se pueda saber con un cierto grado de razonabilidad a cuánto se va a cotizar la divisa estadounidense dentro de seis meses con un spread de compraventa razonable. Si bien cabe la posibilidad de comprar o vender futuros, esas operaciones resultan muy costosas para cualquier empresa porque los spreads son muy altos. Esto responde en buena medida a que no se ha formado un mercado verdadero.

-¿A qué obedece ese vacío?

-Para ello se requiere la existencia de un mercado de dinero fluido en la moneda local, que no lo hay en Uruguay. Si un inversor quiere colocar pesos, conoce las tasas de interés que pagan las Letras de Tesorería del gobierno uruguayo. Es decir, se tiene una señal de tasas pasivas, pero no existe una señal de tasa activa interbancaria en pesos fluida y de corto plazo. En otras palabras, el verdadero costo de un forward es totalmente incierto.

Una posibilidad de facilitar la fluidez del mercado de dinero en pesos uruguayos sería que se formalizara el mercado de "repos" (sigla en inglés de operaciones de venta con pacto de recompra). Tanto en el mercado de futuros en monedas como en el mercado de repos, la Bolsa de Valores de Montevideo podría desempeñar un rol importante, porque facilitaría a los inversores individuales un acceso a esos instrumentos y le daría liquidez a dicho mercado.

-¿Qué beneficios estima que podría ofrecer un mercado de repos?

-Sin duda contribuiría a desdolarizar la plaza local porque habría muchos más inversores dispuestos a comprar títulos en pesos uruguayos y en unidades indexadas a largo plazo si tuvieran la seguridad de que, en caso de necesidad de liquidez temporaria, podrían colocar esos papeles en "repos" y hacerse de dinero.

Las operaciones de venta con pacto de recompra consisten en una transacción por la cual una persona deja sus títulos en garantía al banco por un valor de 100 y le prestan 80 a cambio.

Las ventajas del mercado de repos son, entre otras, que genera mayor demanda por títulos de largo plazo denominados en pesos. Al existir más demanda por títulos de largo plazo, se reduce la tasa de interés a la que el inversor está dispuesto a comprar títulos del gobierno, con lo cual desciende el costo del fondeo para el Estado. Este proceso, al mismo tiempo, contribuye a bajar las tasas en pesos y hacerlas menos volátiles y que, en un momento de iliquidez, haya menor oferta de esos títulos y menos riesgo de caída de precios y, en consecuencia, que el costo de cubrirse sea mucho menor.

Ficha técnica
Pablo Sitjar, uruguayo, 43 años, es contador público egresado de la UdelaR y máster en ciencias de la administración por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Actualmente es director de Renmax Sociedad de Bolsa y vicepresidente de la Bolsa de Valores de Montevideo (BVM). Trabajó en la mesa de operaciones de mercados emergentes de Goldman Sachs en Nueva York durante tres años y fue gerente financiero del Banco Surinvest. Es profesor en los cursos de Máster en Finanzas de la UdelaR y de la Universidad de Montevideo.

15 de octubre de 2011

URUGUAY: el grupo español construirá una planta de granos por USD 120 millones

El grupo español Abengoa firmó un acuerdo preliminar para construir en Uruguay una planta de bioetanol en base a granos por US$120 millones, dijo este viernes un responsable de la estatal uruguaya de biocombustibles, que sería su socia.

La instalación -una planta de tamaño considerable, que tendrá una capacidad de producción anual de 70 millones de litros de etanol- sería construida para la empresa Alcoholes de Uruguay (Alur) en el departamento de Paysandú, unos 380 kilómetros al noroeste de Montevideo.

"Firmamos un acuerdo de intención (con Abengoa) donde se establecieron las bases para la adjudicación de la planta de etanol, con algunas premisas (para crear) una sociedad donde Alur tendría la participación mayoritaria", dijo a Reuters el gerente de Alur, Leonardo De León.

Lo más probable es que en las próximas semanas se consolide el convenio con Abengoa para la construcción y la propiedad de la planta, pero si no se llegara a un acuerdo Alur podrá cerrar un trato con la empresa española Elecnor, también finalista del llamado internacional, dijo.

El acuerdo dependerá de que ambas partes coincidan en la participación accionaria en la sociedad conjunta y en la disposición de los fondos para concretar la inversión.

Abengoa dijo que el preacuerdo incluye también la construcción de una planta de cogeneración contigua, con una capacidad de producción de 8 megavatios (MW) a partir de biomasa, con la que se producirá la energía necesaria para el funcionamiento de la planta de bioetanol.

El grupo español de ingeniería añadió que la construcción demandaría 22 meses, y De León precisó que la planta estaría operando a fines de 2013 o inicios de 2014.

Además, está previsto producir en la misma instalación unas 50.000 toneladas de alimentos para ganado de DDG (granos secos de destilería) con el objetivo de abastecer al mercado interno y de exportar los excedentes. Alur tiene dos plantas industriales de caña de azúcar.

7 de octubre de 2011

URUGUAY: tercer mejor país para invertir

Según la revista norteamericana Forbes, Uruguay está ubicado en el puesto 61 entre los mejores países para hacer negocios y tercero en América del Sur y sexto en América Latina.

El primero de América del Sur es Chile (24 a nivel mundial), seguido por Perú (42). En América Latina le siguen Trinidad y Tobago (49), Méjico (57) y Panamá (60).

Colombia es el número 62, le sigue Paraguay (85), Brasil (89), Argentina (95), Nicaragua (111), Ecuador (114), Bolivia (123) y Venezuela (130).

Mundialmente el ranking es liderado por Canadá, seguido por Nueva Zelanda, Hong Kong, Irlanda, Dinamarca y Singapur.

Complementan los primeros diez Suecia, Noruega, Reino Unido y Estados Unidos. Lo cierran Burundi, Zimbabwe y Chad.

El informe sitúa a Uruguay en el puesto 52 en libertad de comercio, 90 en libertad monetaria, 42 en derechos a la propiedad, 62 en innovación y 45 en tecnología.

Además Uruguay puntúa 109 entre la burocracia, 76 en protección a las inversiones, 23 en corrupción, primero en libertades personales y 114 en presión fiscal.

El informe describe a la economía uruguaya como "caracterizada por exportaciones del sector agrícola, con una fuerza laboral bien formada, y altos niveles de gasto social".

3 de octubre de 2011

Gobierno evalúa cambios en S.A. y analistas proponen mejor camino


Según supo El País, dos expertos del exterior en materia tributaria preparan un informe para el gobierno sobre los cuestionamientos que le hizo la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en cuanto al régimen de acciones al portador y la negativa a intercambiar datos fiscales con Argentina. En tanto, expertos consultados por El País arrojaron luz sobre qué caminos podrían recorrerse para satisfacer los reclamos con un menor sacrificio. Como primer paso, descartan eliminar las acciones al portador y proponen solo hacer algunos ajustes.
Uruguay está siendo auditado por el Foro Global de Transparencia e Intercambio de Información con Fines Tributarios a través de un proceso de "revisión de pares".
A fines de este mes se conocerá si el país pasa la fase uno, donde se evalúa la adecuación del marco regulatorio al estándar de intercambio de información de OCDE. De hacerlo, pasará por otro proceso de evaluación en 2014, la fase dos, donde se analizará si efectivamente cumple con los pedidos de información que recibe.
Uruguay está por cumplir con la firma de los 12 tratados de intercambio de información que le requirió OCDE. Con eso, logrará salir de la "lista gris" que integra desde abril de 2009, al ser considerado una jurisdicción que se comprometió a cumplir con los estándares internacionales de transparencia pero que aún no lo ha hecho.
Pero eso ya no basta. Para avanzar hacia la fase dos hay dos escollos. Uno es que el sistema de acciones al portador no permite conocer a los titulares de empresas en caso de que otro país solicite datos. Otro, es que no se ha firmado un acuerdo de intercambio de información con Argentina, que lo ha requerido varias veces y es un socio comercial relevante para Uruguay. "Hay mucho lugar para mejoras", dijo a El País la semana pasada el jefe del Foro, Pascal Saint-Amans.
Desestimar las recomendaciones de OCDE no es una posibilidad, según los expertos consultados, que resaltan el poder que tiene esta organización. "La posibilidad de no colaborar hay que descartarla. Se tiene que cumplir de la manera más inteligente posible. Cerrándonos no vamos a ningún lado", dijo el ex jefe de la Asesoría Tributaria del Ministerio de Economía, David Eibe.
Los expertos coinciden en que hacer desaparecer el régimen de acciones al portador no es la mejor opción, ya que para satisfacer a OCDE basta con asegurar que el gobierno puede acceder a información sobre los titulares de las mismas.
Una opción son los pasos que siguió Panamá en enero, que mantuvo el régimen pero con la estrategia de "conoce a tu cliente". Alemania y otros europeos también lo aplican. Consiste en que los profesionales que actúan con sociedades al portador, o las propias sociedades, conservan registro de la identidad de accionistas a disposición del fisco. Loaiza dijo que puede ser una opción para "ganar tiempo", pero no definitiva, ya que "cualquier sujeto puede constatar quién es dueño en un momento dado, pero no asegurar que lo siga siendo en los minutos siguientes". Esto "la OCDE lo sabe" y este año le pidió a Alemania que mejorara su sistema.
Negociar con Argentina solución suiza junto a asuntos pendientes
El formato señalado por los expertos a la hora de buscar un acuerdo de intercambio de información fiscal con Argentina es el que tiene Suiza con Alemania e Inglaterra. Algunos sugieren que el tema se negocie en el marco de otros asuntos bilaterales pendientes.
La solución "a la Suiza" consiste en que el fisco uruguayo retenga a través de bancos locales los impuestos que corresponden a los activos de sus residentes extranjeros y lo vuelque al fisco argentino, resguardando el anonimato de los inversores.
Para David Eibe, exjefe de la Asesoría Tributaria del Ministerio de Economía, no es razonable considerar el tema de forma aislada. "Uruguay tiene que reforzar la institucionalidad del Mercosur, discutir el acceso a mercados y una política comercial común, e incluir el tema de la tributación e intercambio de información en ese contexto", dijo.
Para Eibe Uruguay puede ejercer presiones a nivel internacional aprovechando que es "bien visto por la comunidad internacional".
"Debe tratar de generar una posición favorable de los países más relevantes que operan a nivel de OCDE para tener apoyos que le permitan llevar adelante soluciones", dijo el contador.