URUGUAY. inversión hotelera de USD 8: del grupo Fën recupera monumento histórico

El renovado el Hotel Cervantes se reincorporó ayer a la oferta turística de Montevideo. El histórico edificio integra lo que la Intendencia ha dado en llamar "El barrio de las artes", donde conviven emblemas de la cultura como la Sala Verdi y el Solís.

Hace pocos años el Hotel Cervantes tenía un improvisado estacionamiento de vehículos en su recepción. Pero de sus años de gloria subsistía su arquitectura ornamentada al estilo Florentino y otros detalles que el actual concesionario se encargó de rescatar con prolijidad, para transformar al Cervantes en un nuevo hotel "boutique".

Inaugurado en 1928 y declarado monumento histórico, el Hotel Cervantes fue oficialmente inaugurado ayer con su nuevo nombre: Esplendor, un eslabón más en la creciente cadena hotelera argentina Fën.

El rescate de los materiales originales como los mármoles de Carrara, las yeserías del antiguo teatro -que recrean escenas del clásico "Don Quijote" de Cervantes-, la valiosa madera de pinotea en las habitaciones y los mosaicos en damero, son algunos de los valores que se suman a una arquitectura tan firme como refinada.

Ubicado en la calle Soriano casi Andes, el hotel tiene 84 habitaciones con 164 camas. Los servicios incluyen piscina cubierta, gimnasio, spa, sala de reuniones, restaurante y estacionamiento. También se mantuvo su tradicional teatro, de 650 metros cuadrados.

El grupo argentino Fën informó que se invirtieron unos US$ 8 millones para recuperar y modernizar este hotel que supo hospedar a personalidades como Carlos Gardel, Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares, Atahualpa Yupanqui y Julio Cortázar, quien situó en él su cuento "La puerta condenada", de 1956.

Fën es un grupo fundado en el año 2002 -dueño de las cadenas de cuatro estrellas Esplendor y Dazzer- que administra 21 hoteles en Argentina, Paraguay y Uruguay. Maneja emprendimientos en Bariloche, El Calafate y Mendoza, entre otros. Y en Montevideo tiene otros dos proyectos en marcha, en Pocitos y Punta Carretas.

EL "NUEVO" BARRIO. El Cervantes es uno de los polos que la Intendencia ha dado en llamar "Barrio de las Artes", que se proyecta sobre el eje de la calle Soriano, hasta el Teatro Solís.
En pocos años, detrás del Solís, se ubicará también la sede de la Comisión Andina de Fomento (CAF).

Aprovechando las instalaciones culturales ya existentes, la Intendencia pretende impulsar también la instalación de ateliers, estudios, talleres de artesanos, boliches, librerías, disquerías, centros educativos y culturales, así como jugueterías didácticas, casas de diseño, de música y de antigüedades.

Un relevamiento en la zona identificó 58 padrones comerciales, 18 de los cuales son espacios vinculados a las artes. Se encontraron, asimismo, 26 comercios cerrados, en donde se aspira a que se instalen los nuevos emprendimientos.

El proyecto incluye una nueva iluminación de la zona, cuyo primer tramo se realizó gracias a una donación privada de luminarias. El Conglomerado de Turismo anunció que próximamente se instalará una nueva señalética que identificará los distintos puntos turísticos del lugar. Y según los anuncios municipales, en breve se colocará también un sistema de cámaras de vigilancia.